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La población de Bogotá consume un total de 1'300.000 metros cúbicos de agua potable. Cada habitante en promedio gasta 79,4 litros por día, según el Acueducto.
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La clase económica alta consume el doble del líquido que usan los estratos bajos.
El despilfarro de agua en Bogotá está empezando a ganar terreno.
Mientras la ciudad creció, en los últimos cinco años, en más de medio millón de habitantes, el gasto de agua potable, paradójicamente, bajó: pasó de un promedio de 83,8 litros que consumía cada persona por día en el 2005, a 79,4 litros, en el 2010.
Sin embargo, la cultura y el afán por ahorrar el recurso ya no es característica de toda la ciudad. El derroche está advirtiéndose, sobre todo, en los altos estratos.
Según un estudio sobre consumos, que acaba de terminar la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) y que conoció EL TIEMPO, los que más gastan agua son los estratos 5 y 6, y cada vez más.
Antes del 2008, el estrato 5 consumía unos 93,6 litros diarios. El año pasado, esa demanda subió a 118 litros. El estrato 6, que antes usaba 108 litros, pasó a gastar 163, más del doble del agua que utilizan actualmente los estratos 1, 2 y 3. El registro de estos últimos es de 64,71 y 73 litros diarios por persona, respectivamente.
Incluso, mientras los estratos bajos mantienen un consumo casi similar al de hace dos años, el estrato 5 lo incrementó en un 25 por ciento, y el 6, en un 50 por ciento, en igual periodo.
Los mayores gastos (62 por ciento) están generándose en el baño: un 33 por ciento se usa en la ducha y en el lavamanos, y el otro 29 por ciento restante, en la cisterna.
Para la lavadora se destina el 19 por ciento del agua que llega a una vivienda; un 15 por ciento se utiliza en el aseo general de los inmuebles, y solo un 2 por ciento se va por el sifón del lavaplatos.
En cuanto a las industrias, el gerente de la Empresa de Acueducto, Luis Fernando Ulloa, dijo que a pesar del crecimiento que han tenido en la ciudad, demandan igual volumen de agua que hace cinco años: 200.000 metros cúbicos. La principal razón: el 70 por ciento de las fábricas usan aparatos reductores de consumos.
Zonas de más consumo
Ulloa explicó que los 100 macromedidores instalados en la ciudad permitieron establecer, también, que las zonas donde más gastan agua potable son Santa Fe y Ciudad Bolívar.
Aun cuando en el centro hay más oficinas y empleados que residencias, el alto consumo del líquido obedecería al gran número de edificaciones antiguas que hay en la zona, dotadas con sanitarios viejos, que descargan hasta 10 litros más de agua que los sanitarios ahorradores.
En Ciudad Bolívar, el mayor consumo sería causado por inquilinatos y el lavado de ropas.
Recomendaciones para ahorrar agua
Para bajar los consumos en los inodoros puede colocar una o dos botellas llenas en la cisterna. Así se ahorrará 2 a 4 litros en cada descarga. En el mercado venden también sanitarios ahorradores, hasta de 10 litros de agua.
Cierre la llave mientras se cepilla los dientes o se afeita. Ahorra 10 litros.
Las duchas deben ser cortas, de unos cinco a 10 minutos.
Mientras se enjabona, mantenga la llave cerrada. Así el ahorro es de unos 150 litros.
Utilice los dispositivos ahorradores de agua que ya se ofrecen en el mercado.
LUCEVÍN GÓMEZ E.
REDACTORA EL TIEMPO
lucgom@eltiempo.com
El despilfarro de agua en Bogotá está empezando a ganar terreno.
Mientras la ciudad creció, en los últimos cinco años, en más de medio millón de habitantes, el gasto de agua potable, paradójicamente, bajó: pasó de un promedio de 83,8 litros que consumía cada persona por día en el 2005, a 79,4 litros, en el 2010.
Sin embargo, la cultura y el afán por ahorrar el recurso ya no es característica de toda la ciudad. El derroche está advirtiéndose, sobre todo, en los altos estratos.
Según un estudio sobre consumos, que acaba de terminar la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) y que conoció EL TIEMPO, los que más gastan agua son los estratos 5 y 6, y cada vez más.
Antes del 2008, el estrato 5 consumía unos 93,6 litros diarios. El año pasado, esa demanda subió a 118 litros. El estrato 6, que antes usaba 108 litros, pasó a gastar 163, más del doble del agua que utilizan actualmente los estratos 1, 2 y 3. El registro de estos últimos es de 64,71 y 73 litros diarios por persona, respectivamente.
Incluso, mientras los estratos bajos mantienen un consumo casi similar al de hace dos años, el estrato 5 lo incrementó en un 25 por ciento, y el 6, en un 50 por ciento, en igual periodo.
Los mayores gastos (62 por ciento) están generándose en el baño: un 33 por ciento se usa en la ducha y en el lavamanos, y el otro 29 por ciento restante, en la cisterna.
Para la lavadora se destina el 19 por ciento del agua que llega a una vivienda; un 15 por ciento se utiliza en el aseo general de los inmuebles, y solo un 2 por ciento se va por el sifón del lavaplatos.
En cuanto a las industrias, el gerente de la Empresa de Acueducto, Luis Fernando Ulloa, dijo que a pesar del crecimiento que han tenido en la ciudad, demandan igual volumen de agua que hace cinco años: 200.000 metros cúbicos. La principal razón: el 70 por ciento de las fábricas usan aparatos reductores de consumos.
Zonas de más consumo
Ulloa explicó que los 100 macromedidores instalados en la ciudad permitieron establecer, también, que las zonas donde más gastan agua potable son Santa Fe y Ciudad Bolívar.
Aun cuando en el centro hay más oficinas y empleados que residencias, el alto consumo del líquido obedecería al gran número de edificaciones antiguas que hay en la zona, dotadas con sanitarios viejos, que descargan hasta 10 litros más de agua que los sanitarios ahorradores.
En Ciudad Bolívar, el mayor consumo sería causado por inquilinatos y el lavado de ropas.
Recomendaciones para ahorrar agua
Para bajar los consumos en los inodoros puede colocar una o dos botellas llenas en la cisterna. Así se ahorrará 2 a 4 litros en cada descarga. En el mercado venden también sanitarios ahorradores, hasta de 10 litros de agua.
Cierre la llave mientras se cepilla los dientes o se afeita. Ahorra 10 litros.
Las duchas deben ser cortas, de unos cinco a 10 minutos.
Mientras se enjabona, mantenga la llave cerrada. Así el ahorro es de unos 150 litros.
Utilice los dispositivos ahorradores de agua que ya se ofrecen en el mercado.
LUCEVÍN GÓMEZ E.
REDACTORA EL TIEMPO
lucgom@eltiempo.com
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