Debido a la reducción en los índices de contaminación ambiental, las enfermedades respiratorias en niños menores de 5 años disminuyeron un 40%, pasando de 116 casos de muertes en el 2008 a 70 en el 2010. El polvo, hollín y humo (PM10) ha disminuido en un 17% en los últimos años.
En Bogotá, la carga de afectaciones asociadas a condiciones ambientales representa al menos el 42% de los casos en enfermedades respiratorias y diarreicas agudas y los eventos crónicos no transmisibles como la enfermedad cardiovascular y el cáncer.
Ante este panorama, desde 2009 las Secretarías de Ambiente y Salud del Distrito encaminaron sus esfuerzos para superar de raíz los problemas ambientales que afectan la salud de los bogotanos, a través de la construcción de la “Política Distrital de Salud Ambiental”, un documento que incidirá positivamente en las condiciones sanitarias y ambientales y seguirá disminuyendo los índices de mortalidad y morbilidad asociadas a la contaminación ambiental.
Durante su construcción se definieron líneas de intervención que permitieron identificar, analizar y proponer alternativas de solución a los principales problemas en salud ambiental relacionadas con aire, ruido y radiación electromagnética; calidad del agua y saneamiento básico; seguridad química; alimentos sanos y seguros; eventos transmisibles de origen animal; medicamentos seguros; cambio climático; y hábitat, espacio público y movilidad.
El lanzamiento oficial de esta política será mañana jueves 7 de abril en la Gobernación de Cundinamarca, entre las 7:30 y las 10 de la mañana. El evento será presidido por el Alcalde Mayor de Bogotá Samuel Moreno Rojas, el Secretario de Ambiente Juan Antonio Nieto y el Secretario de Salud Héctor Zambrano.
“A través de esta política pretendemos contar con un instrumento que nos permita avanzar en el fortalecimiento de la gestión institucional en salud ambiental, así como contar con una política distrital que permitirá fortalecer las acciones encaminadas al mejoramiento real y duradero de las condiciones sociales y ambientales que determinan la salud de la comunidad”, sostuvo el Alcalde Mayor.
Menos muertes y enfermedades gracias a mejora en la calidad del aire
En los últimos años, Bogotá ha venido mejorando la calidad de aire al disminuir los niveles de material particulado, mejor conocido como polvo, hollín y humo. Según la Secretaría de Ambiente, este contaminante ha bajado su concentración en un 17 por ciento.
Uno de los principales responsables de esta baja fue el pacto firmado entre el Alcalde Mayor y Ecopetrol, con el cual se logró disminuir la concentración del azufre del diesel, al pasar de 1.200 partes por millón en 2007 a menos de 50.
El nuevo combustible se vio reflejado en la reducción de los días que superaron los niveles permitidos de material particulado (150 microgramos por metro cúbico). En 2010 tan sólo se presentaron 15 excedencias (mientras que en 2008 fueron 92), es decir que el año pasado la ciudad tuvo 350 días dentro de los parámetros aceptados ambientalmente.
Estos avances han permitido mejorar la salud de los habitantes de la ciudad, especialmente en la población infantil y de tercera edad, que son los grupos más vulnerables de sufrir enfermedades asociadas a la contaminación. En 2010 se alcanzó una reducción del 40% en muertes por enfermedad respiratoria en menores de 5 años, pasando de 116 casos en el 2008 a 70 casos el año pasado.
Con la reducción en un 17% de partículas contaminantes al aire, disminuyeron en 40 mil las hospitalizaciones de niños y niñas menores de cinco años por enfermedad respiratoria aguda, que fueron atendidos de forma ambulatoria en las Salas ERA y no registraron complicaciones de sus cuadros gripales, que generalmente son obtenidos por virus que circulan en el aire, y que cuando aumenta la contaminación, pueden complicarse por las partículas que van a sus vías respiratorias generando bronquitis, bronquiolitis o incluso neumonía.
Según la Secretaría de Salud, esta baja en el número de hospitalizaciones impactó directamente en la reducción del ausentismo escolar en un 41%, principalmente en jardines infantiles, dado que los niños y niñas que fueron atendidos en las salas ERA de los hospitales distritales recibieron atención ambulatoria especializada, y asesoría en promoción y prevención para los padres de familia en el manejo de la enfermedad en casa.
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